Las hormigas que nunca envejecen
Las
hormigas que nunca envejecen. Científicos de la Universidad de Boston descubren una especie de hormiga
por la que no parece pasar el tiempo.
El nombre del afortunado insecto es Pheidole
dentata, una especie de hormiga americana
que ha estudiado un equipo de investigadores liderados por James Traniello,
profesor de Biología en la Universidad de Boston.
Los resultados de su trabajo, publicado en la revista Proceedings
of the Royal Society B, han sido sorprendentes: estas
hormigas no muestran signos de decadencia en su salud o
su capacidad cuando envejecen. Al contrario, incluso mejoran.
Los científicos observaron
a los insectos en el laboratorio, donde los vieron hacer sus tareas habituales: cuidar
a las larvas y
alimentarlas, buscar y almacenar comida, devorar presas, seguir el rastro de
las feromonas para hallar alimentos…
Después, escogieron una muestra aleatoria de insectos
jóvenes y viejos y estudiaron sus diminutos cerebros,
en busca de signos de envejecimiento como la muerte de las células o
la disminución de los niveles de serotonina y
dopamina. Sorpresa: las pruebas demostraron que no había diferencia entre
veteranos y noveles. De hecho, las
hormigas de más edad exhibían el mismo vigor que las jóvenes,
e incluso las superaban e tareas como seguir rastros de feromonas, una
habilidad en la que cuenta la experiencia.
Sin signos previos de decadencia
Las hormigas vivían una media de 140 días en el
laboratorio y morían
de golpe, sin mostrar signos previos de decadencia,
como si un reloj
biológico marcara de golpe el fin de sus días, sin previo aviso.
Los investigadores no conocen las causas del fenómeno,
pero creen que tiene que ver con el carácter
social de estos insectos, que viven en colonias con una perfecta división y
especialización del trabajo.
Cada ejemplar tiene una longevidad relacionada con la
importancia de la tarea que desempeña. Así, los machos encargados de proveer de
alimentos viven unos pocos meses, pero algunas obreras sobreviven más de un año.
Por otro lado, el hecho de permanecer en grupo aumenta la esperanza de vida, ya
que asegura el acceso a la comida y mejora la protección contra los depredadores y
las infecciones.
Además, las hormigas
mayores se encargan de las tareas más peligrosas,
así que pocas jóvenes mueren, lo que asegura un grupo siempre vigoroso y
renovado. Que los individuos de más edad mantengan su fortaleza hasta el último
momento favorece a la colonia y asegura la supervivencia de la reina.
Historia Fuente: Muy interesante,es